Uruguay y los álbumes de Panini



En años en los que el papel sigue cediendo espacio frente al avance inexorable de lo digital, existe un bastión que parece resistir el paso del tiempo, y que oficia de nexo entre diferentes generaciones que siguen viviendo la emoción de abrir un sobre y encontrar un Luis Suárez, un Leo Messi, un Edson Arantes Do Nascimento Pelé.

Hablamos del viejo y querido álbum de figuritas que hoy vuelve a decir presente en casas, recreos y rincones de todo el país de la mano del Álbum de la Copa América de la multinacional italiana Panini.


Principio tienen las cosas

Panini surgió como el sueño de 4 hermanos que tenían un kiosko y que cuando se quisieron acordar, tenían las franquicias de las principales federaciones deportivas y de cómics del mundo. 

Veamos a los cuatro hermanos, y cuentemé en los comentarios quiénes son, admitiéndose solo respuestas incorrectas.


Todo comenzó con unas tarjetas que tenían medio de clavo, y que los Panini decidieron vender en lotes de dos, inaugurando el concepto de “sobre de figuritas” allá por 1961. Al ver que la cosa funcionaba, probaron suerte con el calcio, y vaya si les fue bien. Cuando se quisieron acordar, tenían más guita que el suegro de Sartori.

Un dato interesante, dijo nadie

Las figuritas que se venden en Uruguay, se imprimen en Brasil. La otra gran imprenta del continente se encuentra en México. Pero en 2022, llegó un cargamento de figuritas directo desde Italia, debido a la alta demanda. Lo dijo el Nico Lerner, lo escuché en Todo por la Misma Plata.

Orígenes

El primer Mundial que tuvo álbum oficial de Panini fue el de México 70.

Precisamente, podemos ver la foto de la portada de ese primer álbum oficial de la FIFA:

Medio poronga. Y también podemos ver la imagen del plantel uruguayo en esa Copa del Mundo.

Ahí podemos apreciar, a diferencia de los álbumes más modernos, que cada país tenía solo una página, y con apenas 11 jugadores (5 de Peñarol, 4 de Nacional y 2 de Cerro Cerro). Sin embargo, el diseño de las figuritas se ha mantenido casi inalterable: la foto del jugador, su nombre, el nombre del país, el escudo de la federación, el logo del Mundial, la Mascota, y la Copa.


Problemas tenemos todos

Las listas de cada equipo las define la empresa, en función de las citaciones previas a la publicación del álbum, que se da generalmente 3 meses antes del evento en cuestión.

Pero claro: siempre hay sorpresas, tapados que irrumpen sobre el final, o estrellas que se joden el sóleo y quedan afuera de la competencia. Antes, incluso, cada equipo contaba con apenas 11 o 15 figuritas, por lo que las posibilidades de dejar afuera a una máxima figura del certamen eran muy altas.

Volviendo al ejemplo de 1970, no están Ildo Maneiro, Juan Martín Mugica ni Víctor Espárrago, jugadores de Nacional que marcaron 3 de los 4 goles que anotó Uruguay en ese certamen. Siempre contra Nacional, eh.

Más acá en el tiempo, se produjo no ya una omisión sino un error: agarraron a un afrodescendiente Olivera y le pusieron la cara de otro. Vea si no:

El caso uruguayo

Generalmente se dice que los uruguayos somos humildes, pero nada nos gusta más que sentirnos diferentes, de sentirnos poco menos que un pueblo elegido para las pequeñas grandes cosas, tales como ser el país con mayor consumo per cápita de figuritas. ¡Chupen, giles! ¡La tragedia de los Andes es nuestra y esto de las figuritas también!

Sin embargo, los álbumes oficiales tardaron en llegar a nuestras cosas. El del 90 fue el primero que se comercializó en Uruguay gracias a Montevideo Refrescos. Luego, Portezuelo tomó la posta y desde 1994 te daba las figuritas con sus clásicos alfajores: para llenar el álbum estabas obligado a convertirte en diabético. Después, a partir de 2002, ya te podías comprar las figuritas de manera independiente, sin necesidad de elevar tu colesterol.

Veamos algunas páginas de esta historia. El de 1970 ya lo vimos, así que veamos el de 1974:


Destaque para el Nando, que en ese Mundial casi la toca. Y para Espárrago, que se sirven en la mesa, tal como nos enseñara Brian, el hijo de Willy (¿entendió la referencia? Hagaló saber en los comentarios).

¿Qué le pasaba a Denis Milar? Otro destaque: el Indio Olivera lampiño.

En el 78, no fuimos al Mundial. Tampoco en el 82. En el 86 sí. Sigan la cara de "y pensar que me habían dicho" del Patito Aguilera, otrora en "Nacional Montevideo", desaparecido equipo. Ojo, no se hagan los guapos porque Bossio jugaba en el también desaparecido "Peñarol Montevideo", y Eduardo en el "Defensor Montevideo", gran animador de los certámenes montevideanos de aquella época.


En el 90 nos quisieron cagar. La versión original, no tenía a Harry:


Pero la que se comercializó en Uruguay, sí:


Por eso, Uruguay es el mejor país.

Veamos la segunda página, donde acá le agregaron al Manteca Martínez y a Fonseca. No encontraron foto con la misma camiseta, así que le encajaron otra. "Total, nadie se va a dar cuenta":


¿Una rareza? La versión argentina del álbum cocacolero, con algunas fotos que se repiten y otras que no, e incluyendo al Maestro:



Miren qué divertido, le ponen tilde a los tres "Ruben" del equipo.

En 2002 lo dicho: Uruguay dijo presente tras doble ausencia en 1994 y 1998, pero nos quedamos afuera enseguida, casi tan rápido como en 2022 (aunque 20 años antes, estuvimos más cerca de clasificar). Destaque para la camiseta marca MGR, como 22 años después.


Nueva ausencia en 2006 y ahí sí, en 2010, llegaron las dulces:


¿Soy yo, o el cuerpo de Godín y el de Gargano son el mismo? En cualquier caso, ¡cuánto pelo tenía el Faraón!

Ya para 2014 empezó a perder algunas chuzas. El álbum de Brasil es muy recordado porque si cerrabas las páginas muy rápido, Abel se lesionaba:


Estaba bravo el del 2018, ¿eh? ¿Corujo? ¿El Cacha? Que vuelvan.

Y por último, el álbum del nefasto Mundial 2022. El primero en mucho tiempo con dos arqueros:

En cualquier caso, salga desde estas páginas el justo homenaje al Maestro Tabárez, cuya irrupción logró que nuestros niños no tengan que sufrir la ingnominia de ver un álbum sin Uruguay. ¿Alguna vez usted vio un niño chileno feliz? Seguramente no. 

¿Se preguntó por qué? Porque usted no vive en Chile, me dirá. Pero no: es porque van dos Mundiales que ven de afuera. Hay niños con 10 años que nunca vieron a Chile jugar un partido mundialista. Más o menos lo que les pasaba a los de mi generación, que no en vano salió amargada y pesimista.

Y nos vamos con más...

Datos random que nadie pidió

  • El álbum de una Copa América tiene una demanda del 50% respecto a un álbum mundialista, aunque si pasamos de fase, seguro se vende más. ¿Eh, Tornado?
  • En el de la Copa América 2024, hay unas figuritas extras de 16 jugadores seleccionados que vienen en cuatro categorías: base, bronce, plata y oro. Sacás un Suárez de oro y lo vendés en 500.000 pesos como quien no quiere la cosa. Cada sobre duele 45 pesos. El precio del álbum fluctúa.
  • Si te quedan 50 figuritas, sean cuales fueren, vas a Panini y las comprás a 16 pesos la unidad, mucho más baratas que en la feria. ¿Y si te quedan 37? También.
  • No hay figuritas difíciles. Hay más demanda de un Messi que de un Keke Almeida, pero la cantidad de Lios y de Kekes es la misma, gracias al exclusivo sistema de impresión y barajado aleatorio de figuritas que los dueños de Panini deberán llevarse a la tumba. Es decir: hay figuritas difíciles.
  • En algún momento los álbumes tenían entrenadores y hasta presidentes de las federaciones. ¿Hay chance de que vuelvan y tengamos un Bielsa o un Chiqui Tapia en el álbum? ¡Ojalá!
  • Las figuritas mundialistas de Panini comenzaron a ser autoadhesivas a partir del Mundial de 1974. ¿Antes? Meta cascola o voligoma (se cansan de pegar).
¿Tiene algún comentario digno para hacer? No se lo guarde. Gracias.

Comentarios

  1. Para mí son Espalter, Trotta, D´Angelo y Raimundo Soto antes de filmar Telecataplum en el escenario "Eugenio Scheck" de Canal 12

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