Hola a todes.
Bienvenidos nuevamente por esta parte del blog.
Nos Situamos en el verano de 1942, la Alemania nazi lanzaba su segunda gran ofensiva en el frente oriental y llegarían a Stalingrado el 23 de agosto de ese mismo año. Al momento de la llegada a la ciudad se dieron cuenta que sus tanques no iban a ser muy útiles para el combate urbano debido a entre otras cosas, que la ciudad estaba totalmente destruida por los bombardeos de la Luftwaffe (Fuerza aérea alemán) y esto dificultaba el avance de los mismos.
Vista aérea de Stalingrado durante un bombardeo alemán. |
Fue por esto que una gran parte de esos tanques en la cual estaba incluido la división 22da Panzer, fue dejada en refugios durante un tiempo prolongado. Se dejaban en graneros de granjas abandonadas y se los cubría con paja para protegerlos del frio y también para camuflarlos, para el caso de quedar a la intemperie y que al momento de encenderlos esto no fuera un problema. Entre el 19 y el 23 de noviembre de 1942 el ejército rojo lanzo la contraofensiva que se llamó Operación Urano, que fue el nombre en clave dado a la misma. Esta operación condujo al embolsamiento del 6to ejército alemán y otras fuerzas del eje, entre las que se encontraba la 22da Panzer.
Foto de un soldado alemán durante la batalla de Stalingrado |
Foto de soldados soviéticos durante la batalla de Stalingrado |
Con el paso de los días los alemanes empezaron a perder gran parte de sus tanques a manos de los T34 soviéticos. Pero la gran sorpresa que se llevaron los alemanes fue que al necesitar volver a usar sus Panzer guardados, muchos no arrancaron por problemas del frio que fue un tema que los alemanes no tuvieron en cuenta, una cosa es que el tanque prenda todos los días y otra muy diferente es que el mismo este mucho tiempo detenido.
Tanque alemán Panzer |
Tanque soviético T34 |
Pero la mayor sorpresa no fue el frio, si no que las ratas en más de cien tanques se habían comido el aislamiento del cableado eléctrico, así como caños de combustibles y en algunos casos, parte del sistema de disparo del tanque lo que en caso de arrancar, no podían utilizar su cañón. Este fue sin lugar a dudas un gran error del ejercito Alemán ya que quizás la historia hubiera sido otra si hubieran logrado usar toda su capacidad blindada. Pero eso por suerte no sucedió.
Gracias por leer esta columna y los espero para la próxima
historia.
Imaginate si hubieran dejado los tanques en ciertos barrios montevideanos. Excelente columna, como nos tenés acostumbrados.
ResponderBorrarJajaja no hubiera quedado nada de los tanques, gracias por leer Álvaro.
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