Salada la Canchita en el Festival de Cannes 2024

Por razones más bien misteriosas, el Festival de Cannes (pronúnciase "cannnnns") pasa por ser el más glamoroso, importante, publicitado y el más mejor de todos los de su tipo. Celosos del de Cinemateca, ahí también estuve como corresponsal de "Todoporlamismaplata.com", Radio Rural y "Santo y Seña", luego de que la Presidenta del Jurado, Greta Gerwig, con quien tuve un breve romance atrás del carro de comida venezolana del Velódromo en el último Carnaval, me enviara la acreditación.

Acá estoy, con Anya Taylor-Joy, un par de trolas y un loquito que dice que es un dios nórdico.

Vamos directo a los bifes: la Competición Oficial por la Palma de Oro -no necesariamente donde están las mejores películas, pero sí las más prestigiosas dentro de la etiqueta "cine de autor", sea esto lo que sea- tuvo como siempre una particular mezcla de directores famosos con alguno nuevo, pero esta vez no tuvo un par de films de algún país medio raro, como para hacer de cuenta que todos tienen las mismas posibilidades. Primer Mundo o gente famosa (la china), nada más.

Eva Longoria en una pose casual

 

 

 

Entre los más conocidos estaban David Cronenberg con "Los sudarios" (pongo los nombres traducidos, como si supiera inglés); Francis Ford Coppola con "Megalópolis", que hacía 40 años que la andaba anunciando; Yorgos Lanthimos con "Tipos de gentileza", repitiendo con Emma Stone (mmmm) y Willem Dafoe; Jia Zhang Ke con "Atrapada por las mareas"; Paul Schrader por "Oh Canadá" y Jacques Audiard con "Emilia Pérez" (seguramente el título que traduje mejor).    Cronenberg y Lanthimos coinciden en hablar de gente que se comunica con gente finada; el veterano Schrader, en cambio, cuenta sobre un izquierdista que escapó de ir a Vietnam (a la guerra, obvio) exiliándose; hubo musicales inesperados como la del chino Jia y la citada "Emilia Pérez", ésta última sobre un jefe narco que se cambia de sexo (quién le va a decir algo). 

Anora

 

 

 

 

 

 

Otros films: el iraní Ali Abbasi "Holly spider") trata la juventud de Trump -cuando tenía pelo de verdad- en "El aprendiz", coproducción canadiense y yanqui; el ruso Kirill Serebrennikov ("Verano") con "Limonov: The ballad of Eddie" -tomá pa vos, Juan Pablo-; Paolo Sorrentino ("La gran belleza", "Fue la mano de dios") con "Parthenope", un polémico retrato femenino; el brasileño Karim Aïnouz (no confundir con su hermana Karen, también cineasta y también Aïnouz, casualmente) filmó en Alemania "Motel Destino"; el inclasificable portugués Miguel Gomes con "Grand Tour" y un homenaje al enorme Marcello Mastroianni por parte del interesante director francés Christophe Honoré con "Marcello mio", con el protagónico de su hija Chiara (que es igualita al "agachate y conocello" de la gente).

Según la gente que entiende de cine -categoría en la que no estoy claramente incluído- el nivel general fue bastante flojeli. No hubo audacias polémicas como "Titane" (inédita en Uruguay) ni calidades sólidas como "El triángulo de las tristezas" o "Anatomía de una caída", por citar las últimas Palmas. Justamente, el premio mayor fue a parar a "Anora" del estadounidense Sean Baker ("Tangerine", "Proyecto Florida"), un autor independiente realmente valioso y que parece haber llegado aquí a una culminación.  

Emilia Pérez

 

 

 

 

 

 

La película diferente, extraña y polémica llegó, sorprendentemente, de la mano del director más veterano de la competición: "Megalópolis", de Coppola, que ha fascinado a algunos, enojado a varios y decepcionado a la gran mayoría. Si se estrena aquí en el paisito -ni idea, porque aún no lo ha hecho en todo lo que es el planeta La Tierra- todos los grandes medios van a romper con que el jovato vendió sus viñedos para financiarla y todo eso, cosa que a nosotros nos interesa un joraca. Lo único que importa es que el tipo hizo con su guita la historia de un arquitecto (Adam Driver) que reconstruye New York, sin que nadie le dijera cómo la tenía que hacer y jugándosela casi como en "Apocalypsis now" pero sin selva. Coppola dejó el alma en esta película y sólo por eso, viejo Francis, tenés asegurada tu Canchita cuando la vea. Y si te quedó algún tinto, traelo.     

TRAILER DE "ANORA"

TRAILER DE "MEGALOPOLIS"

 

Y.E.T.P.A.P.

EDGARDO COZARINSKY (85) - Típico representante del intelectual inquieto, cosmopolita, políglota y culto que podía interactuar con sus pares primermundistas de igual a igual. O superándolos, porque conocía bien nuestras tierras y culturas que aquellos no valoran ni comprenden. Más conocido por sus trabajos en teatro y literatura, también tiene una obra exigente y sin concesiones en cine, poco conocida fuera de Francia -donde pasó la mayor parte de su exilio durante la última dictadura argentina- y su propio país. Importan "La guerra de un solo hombre" (1981) donde por un lado hace leer las memorias del escritor y oficial alemán Ernest Junger y, en contraste, vemos imágenes de la guerra mundial que el autor glorifica; "Fantasmas de Tanger (1997); "El violín de Rothschild" (1996) sobre Shostakovich, que tiene una ópera entera en el medio; "Guerreros y cautivas" (1989) un western criollo con Federico Luppi, Dominique Sanda, Leslie Caron, China Zorrilla y Selva Aleman, que se proyectó, pero estaba inconclusa y alguna otra más. Un secreto bien guardado por los argentinos.

      

 

 

 

 

THE YAPING

Tené en cuenta que, dentro de un par de años, cuando quieras comprar el libro con estas historietas, no va a bajar de un par de miles. Porque la fama hay que pagarla.