“En la representaciĂłn teatral de la humanidad y a lo largo de todos los tiempos la mujer ha tenido el papel secundario, aunque ese rol lo ha tenido solamente para al espectador, porque la realidad es que sin ellas la obra nunca se hubiera puesto en escena.”
El relacionamiento humano y sus complejidades
siempre ha captado mi atenciĂłn, me ha colmado de curiosidad y me ha llevado a
tratar de encontrarle explicaciĂłn a semejante fenĂłmeno.
Créanme que aún no he podido cumplir con ese objetivo.
En espacio hablaremos de Hombres y Mujeres, de
sufrimiento, de dolor, de violencia, de resiliencia, de fortaleza y de
conquistas.
Para no tratarlo como un frĂo estudio social o como una simple tabla estadĂstica, veremos todos los ejemplos a travĂ©s de la historia de BelĂ©n, una niña huĂ©rfana por el femicidio de su madre.
¿BelĂ©n existe? Si
claro, en cada niño huérfano, en cada adolescente sola y en cada mujer que se
abre camino a pesar de las circunstancias.
LOS NIĂ‘OS SOLO
QUIEREN JUGAR. -
Belén nació
hace un par de décadas, en una ciudad del interior, era una niña inquieta,
hermosa, con ojos grandes, muy claros y muy curiosos, de esos que observan todo,
su piel muy blanca y su pelo rubio casi dorado llamaba la atenciĂłn de todos.
Cuando naciĂł, sus padres vivĂan en una casa de propiedad horizontal de esas que
se extienden los apartamentos hacia el fondo y todos se comunican por un
pasillo al frente de sus puertas. El de ellos era el nÂş3, en el apto nÂş2 vivĂa
una pareja de veteranos que estaban solos, tenĂan hijos adultos y solo un nieto
venĂa a veces a quedarse con ellos, era más hijo que nieto. HabĂa ya tres niños en la casa a la llegada
de Belén por lo que los vecinos decidieron colaborar con la crianza y tender
una mano a esa madre tan joven y tan ocupada, asà se acostumbró la niña a tener
dos casas porque cuando la familia se iba mudando, siempre en busca de más
espacio, BelĂ©n seguĂa volviendo a esa casa, su segunda casa. Al lado de la
propiedad horizontal, en una casa a medio construir, vivĂa la abuela materna de
Belén y su marido al que a pesar de no tener parentesco biológico todos los
chicos llamaban “Abuelo”, esa casa tenĂa
un enorme fondo con una huerta muy variada y un gallinero enorme
proveedor de huevos en buena cantidad.
Todos
vivĂan muy humildemente, la niñez de BelĂ©n se fue desarrollando entre mudanzas,
nuevos barrios, nuevos amigos y nuevos hermanos, a sus 9 años ya eran 9
hermanos, 3 varones y 6 niñas. Su vida no era fácil, aunque
de eso no se habĂa enterado aĂşn, le gustaba ir a la escuela porque allĂ sentĂa
que alguien la esperaba, se sentĂa vista y atendida, en su casa con tantos
pequeños no habĂa tiempo para la atenciĂłn personalizada, eran pocas las
demostraciones de cariño, escaseaban los abrazos, siempre habĂa un bebe
ocupando esos brazos.
El almuerzo
en el comedor escolar era la mejor parte del dĂa, no solo por la comida sino
porque despuĂ©s de eso siempre habĂa un tiempo para jugar con sus compañeros. Aprender
le abrĂa un mundo de posibilidades le gusta mucho estudiar, era aplicada y se
habĂa acostumbrado a hacer las tareas sola, las dejaba hechas antes de salir a
jugar, una vez escuchĂł a alguien decir que a la capital se iban los chicos a
estudiar y ella anhelaba conocer la capital, la veĂa en la tv. VeĂa la playa,
los edificios altos y los semáforos y querĂa estar en ese lugar, se emocionaba
imaginándose todo lo que harĂa cuando lograra llegar a allĂ, imaginaba una vida
de lujos y diversiĂłn, se proyectaba vestida formal yendo a trabajar a una
hermosa oficina y se imaginaba viajando y divirtiéndose con amigos.
Era una
niña muy sociable tenĂa muchos amigos en su barrio era un tiempo donde las
apariencias no eran lo sustancial, donde vestir humilde no era limitante,
jugaban todos juntos, las niñas, los niños, chicos de más y menos edad, jugaban
con juguetes de otros niños con mejor nivel econĂłmico, BelĂ©n no sabĂa lo que
era un juguete nuevo, en su casa no habĂa navidad, ni reyes, ni mucho menos
fiesta de cumpleaños, compartĂan bicicletas, pelotas, patines, se jugaba en la
calle hasta que la noche no los dejaba verse, compartĂa tiempo con amigos de
sus hermanos mayores habĂa entre ellos un niño que se expresaba diferente y
siempre habĂa que ayudarlo a todo, nunca se preguntaron la razĂłn de eso, y
habĂa tambiĂ©n algĂşn chico que llamaba la atenciĂłn de BelĂ©n, que la hacĂa
sonrojarse alguna vez. Hasta este punto estar a la moda no era tema de
conversaciĂłn, lo que usaban no era un problema, al menos para ella, en su casa
todos vestĂan las prendas que confeccionaba o tejĂa su madre, Mabel.
Hasta acá puedo decirles que BelĂ©n era una niña feliz, tenĂa carencias afectivas y econĂłmicas que no reconocĂa porque el relacionamiento con sus pares del modo más primitivo, en total inocencia y despojado de todo tipo de prejuicios le daba a su vida todo el valor que necesitaba.
Bien, Pitu. Buen debut. Esperaremos ansiosamente el desenlace de la historia y cómo Belén Zorrilla salió de ese hogar humilde a ser coconductora del programa homónimo a este blog.
ResponderBorrarGracias Faga!!
BorrarPitu, si la ves por ahà a esta Belén, a todas ellas, dales un abrazo grande.
ResponderBorrarGracias Ale, dalo por hecho.
BorrarNo pude evitar recordar algĂşn chiste carnavalesco, no sĂ© si categorĂa humorista o parodista, afirmando que asĂ como ArquĂmedes dijo "¡Eureka!" al descubrir los efectos de su principio, el inventor de la minifalda fue un francĂ©s, que al aproximarse a la primera usuaria de su confecciĂłn, espetĂł: "¡C'est la vie!".
ResponderBorrarMuy buena columna, recordĂ© (i.e. volvĂ a pasar por el corazĂłn) la infancia en un barrio INVE, todas casas igualitas, con techo a 2 aguas revestido de tejas, donde vivĂan familias o descendientes de empleados de las varias fábricas textiles del barrio. Otro Uruguay, otro dĂłlar.
ResponderBorrarBelén tiene el nombre de la localidad en la antigua Palestina, en la que nació el más humilde de todos los niños, el más poderoso entre los débiles.
Luis?
BorrarQue bueno que te lleve a ese lugar!! Gracias por el comentario :)
BorrarSelente comienzo.
ResponderBorrarAgendo continuaciĂłn!!
Bien Pitu!! Qué triste Belén sin Reyes.
ResponderBorrarGracias!!!
BorrarPitu, quedo a la espera de nuevas entregas, muy buen comienzo!
ResponderBorrarGracias!! Solo anticipo que hay bastante material :)
BorrarMuy interesante, si serán insondables y complejas las relaciones humanas a veces. A esperar hasta la semana que viene
ResponderBorrarMuy complejas, te vas a sorprender. Gracias por el comentario.
Borrar"Los insondables". Qué buena serie...
ResponderBorrarGran comienzo Pitu!!! que encare interesante!
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